8.12.11

I just don’t know what to do with myself.

De un tiempo a acá nada es igual. No sé qué lo inició pero ahora me resulta difícil volver a encontrar mi camino; ese camino que creía hecho a mi medida y del que me desvié en algún momento, sin siquiera darme cuenta.
Ahora estoy caminando lejos de todo aquello en lo que creí que era buena. De todo aquello que creí que era bueno. Estoy perdida y necesitando una mano amiga.
Pero me es tan difícil pedir ayuda. Me he acostumbrado a caminar sola y la mala costumbre no se me quita. Creí que el tiempo a solas sería suficiente para recuperar a la vieja de mí, pero no es así. Por el contrario, he alejado a aquellos en los que confío con cualquier excusa.
Pero tengo que aceptarlo: estoy perdida. Perdida como hace un par de años cuando sentí que mi vida no tenía sentido y que nada por lo que siguiera viviendo era suficiente razón como para seguir haciéndolo. Buscando una razón lo suficientemente fuerte como para no soltar la única mano que intenta sujetarme del precipicio.
No. No quiero dejarme caer como aquella vez. No creo que pueda volver a levantarme si lo hago. A demás, ya crecí. Ya no soy la misma niñita inmadura que se dejaba derrumbar por cualquier dificultad. Ya basta de andar llorando por los rincones. Ya no quiero ser débil, por favor.

Un abrazo ayudaría. Lástima que no me guste el contacto físico.


3 comentarios:

  1. Podría hacer ahora lo que hacen los buenos amigos: decir algo reconfortante que te diera confianza, o regalarte un libro de autoayuda. Pero sabes que nunca haré eso, así que sólo queda decir: Ya que te debo mi vida y unos cuantos soles más, ¿vamos al Mundo Light?

    ResponderEliminar
  2. Las aguas se han calmado, brother. Todo está mucho mejor ahora. (:

    ResponderEliminar